El Trabajo de Dios

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Reflexiones Obispo Carlos Arturo Quintero Gómez

Me pregunto: estoy alcanzando la talla de Cristo?

Me pregunto: estoy alcanzando la talla de Cristo?

5/19/2019
Señor, hoy quiero comenzar este nuevo día con el salmista diciendo: “bendeciré tu nombre por siempre oh Dios”. Te alabo y te bendigo por la creación, por la lluvia que cae a la tierra, la empapa y la hace más fecunda. Te alabo por la gran familia cristiana que nos has dado; por el sol que nos calienta y la belleza de nuestro paisaje.

Señor, en el libro de los hechos de los Apóstoles, leemos: “hay que pasar por muchas tribulaciones para entrar en el reino de Dios”. Siento miedo al tener que pasar por la prueba; siento temor al pensar en el dolor y el sufrimiento, pero al contemplarte en la Cruz me doy cuenta que, para ser tu discípulo, debo morir en ella.

Me cuesta morir Señor, porque el mundo me habla de bienestar y me dice que no debo sufrir. No quiero ser sado-masoquista, tampoco narcisista, quiero Señor entender que mi vida será fecunda material y espiritualmente en la medida en que muera en la Cruz.

Hoy crucifico contigo mis pecados, mis vicios y mis defectos. En este itinerario de fe puedo comprender también Señor, que tú quieres hacer algo nuevo en mi y me das la clave para vivir este nuevo nacimiento: el amor.

Nos has dejado el mejor testamento espiritual: “ámense los unos a los otros como Yo los he amado”. Hoy me pregunto delante de ti: que tanta capacidad de amor poseo? Quiero alcanzar la talla de Cristo en mi vida, parecerme cada vez a lo que predico, ser otro Cristo para la humanidad.

Me pregunto: estoy alcanzando la talla de Cristo? Algunos quieren ser talla S en la ropa que usan y se esfuerzan haciendo ejercicio, otros reconocen que son talla XL, o talla L, M. Pero la talla que yo quiero alcanzar, es la talla C, es decir, la talla de Cristo.

Señor, que para lograrlo empiece con lo más sencillo: una talla S que me inspire la solidaridad; una talla M que me inspire la misericordia; una talla P que me inspire la paciencia; una talla L que me inspire la lealtad; una talla F que me inspire la fidelidad; una talla Doble A que me inspire el amor y la alegría; una talla O que me inspire la obediencia. En fin, quiero una talla para alcanzar la plenitud del amor de Dios.

Dame Señor la alegría de vivir este itinerario de fe con esperanza. Te lo pido por intercesión de la Santísima Virgen María, torre de marfil y casa de oro. Amén

Me pregunto: estoy alcanzando la talla de Cristo?

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