6/13/2019
Señor, que alegría poder despertar, comenzar un nuevo día y levantarse a vivir cada día con amor y con pasión. Hoy Señor quiero poner en tus manos mis éxitos y anhelos, mis alegrías y esperanzas; mis preocupaciones y tristezas, mis frustraciones y desencantos.
Pienso hoy Señor en el valor del compromiso. Sabes Señor? A veces me cuesta vivir el compromiso Cristiano, entender mi misión en la tierra y asumir mi responsabilidad.
Hoy te pido que me des la fortaleza para aceptar mi realidad y para comprometerme contigo y con la historia, con mi propia verdad y con mi realidad humana y comunitaria.
Siento miedo para dar el paso al compromiso. Por ejemplo Señor, me da miedo decir si al matrimonio; siento temor en corresponder a tu llamada de amor; titubeo ante la exigencia del evangelio; como el hijo pródigo muchas veces me voy de tu lado para vivir mi vida a mis anchas malgastando todos los talentos que me has dado; muchas veces flaqueo y me siento débil ante la responsabilidad que debo asumir como profesional o en la vida política o en el escenario social.
Siento tambalear ante la indiferencia y prefiero muchas veces el silencio, quedarme callado a denunciar los atropellaos contra la dignidad humana por temor a amenazas.
Hoy reconozco que el compromiso es un camino de obediencia, que exige la misericordia, la prudencia y la responsabilidad como hijo tuyo. El gran reto es precisamente ofrecer mi vida por los demás, sin esperar recompensa alguna, con mansedumbre enfrentar los problemas de cada día sembrando ilusión, gozo y esperanza, despertando la sensibilidad frente al dolor ajeno y haciendo de mi vida una ofrenda de amor.
Quiero Señor comprometerme y morir en la Cruz para resucitar a una vida nueva. Ayúdame a superar los obstáculos y a trabajar arduamente por el reino de los cielos. Te lo pido por intercesión de la Santísima Virgen María, abogada nuestra. Amén |
